sábado, 28 de marzo de 2009

Expectorando odio, ganando paz

Es increíble como nuestra mente puede afectar a nuestro cuerpo. Anoche dije muchas cosas a alguien que curiosamente me había estado ayudando a aprender a DECIR LO QUE SIENTO, anoche hubo una hemorragia de sentimientos y hoy me siento bien, demasiado bien debería decir.

Y así, le cuento a una amiga que siento un gran alivio en el pecho, que jamás me había sentido tan bien en esta vida y ojo que no hablo a ese DEBER SENTIRSE BIEN, metiéndose ideas de superación y autoayuda, sino simplemente SENTIRSE BIEN, o sea, tranquila en paz conmigo misma, no me odio, ya no me siento cansada, no veo los días grises y claro, la verguenza por el pobre amigo está allí, pero agradezco que esto haya pasado, creo que nunca en mi vida habia dicho lo que realmente siento y creo que he descargado con esta persona mucho.

Desde aquí, querido amigo, te digo gracias, por ser la personita tan especial que eres, supongo que por eso me enamoré de ti. Muchas gracias por haber soportado lo de anoche sin mandarme a la M créeme que yo sí lo hubiera hecho, al final creo que tú eres mejor persona que yo.

Gracias por ser tan gente, gracias porque te debo mucho desde ahora, una nueva Sofi que ha botado todo lo que tenía en su pecho (literalmente) Esta gran amiga me dijo que siento un alivio en el pecho porque se ha abierto mi timo y el timo no es otra cosa que un órgano que controla el sistema inmunológico y que es golpeado cuando tenemos problemas irresueltos.

Ahora entiendo por qué me enfermo tanto, ahora entiendo por qué tanta neurosis. Mi timo estaba cerrado y sabe Dios desde qué siglo. Y es que nunca he querido resolver mis problemas emocionales, siempre cerrándome en lo racional.

Desde muy pequeña he sido de no contar nada a nadie, no hablar de lo que siento ni decirle a nadie lo que siento por ellos y de allí mi creciente interés por la escritura, siempre escribí todo lo que pensaba y sentía, desde los 8 años de edad. Si bien es cierto esto trae cosas muy buenas como el poder redactar con soltura, el amor inmenso hacia las letras, la literatura, en mi caso bloqueó mi percepción de la realidad y la confianza en lo que yo sentía, descalificando por completo a mis emociones, refugiándome en mi cerebro, excesiva racionalidad le llaman.

Y así, con más de 20 tantos años bloqueando las emociones y usando el raciocinio para todo, mies emociones desbordaron, no pude más. La combianción de excesivo odio por C y excesivo cariño por X, más la indignación por el rechazo de X, resultaron en una convulsión emocional que hizo abrir mi timo.

Siento un indescriptible alivio en el pecho, jamás sentido. No siento odio, ni amor obsesivo, ni ansiedad, ni cansancio. Me parece increíble que exista un órgano que pueda manejar eso ¡es increíble!

Ya más tranquila y sorprendida por la causa de todos mis males (problemas irresueltos que clausuraron al timo), busqué en google acerca de el timo y no ceso de estar sorprendida, pues al hecho de que haya estado cerrado se deben todos mis males, incluso ese del sistema inmunológico débil, que siempre me pregunté por qué lo tenía así si mis padres siempre se esmeraron en alimentarme bien, incluso prodigándome suplementos vitamínicos.

Me siento muy bien y ojo que no estoy tratando de sentirme bien a punta de pensamientos de autoayuda, no, ahora sí me siento bien y ya veo que es algo además de emocional, muy físico. Mi mente explosionó diciendo lo que siento y con ello se liberó mi cuerpo.

Ahora sé lo que es estar en equilibro en cuerpo y mente (y alma)

Me siento en paz.

Gracias amigo, por el aguante, la paciencia, por ser una genial persona, mejor que yo que trato de demostrar en grandes cosas que soy buena.

Estamos conversando, si aun quieres conservar esta amistad. Ahora sí será una amistad buena, lo sé, ya conversaremos un día, por lo pronto ando allí y cuando necesites alguna ayuda, ya sabes, búscame, pero sorry si es que te digo "no" en algunas ocasiones, quizá vaya a ser porque ando con mis cosas y ahora quiero priorizar eso antes que cualquier otra persona, por más amiga que sea.

No te preocupes, no te acosaré, ya entendí, y ahora sólo quiero paz. Como te dije hace algunos días, sólo quiero estar tranquila, así que llevemos la fiesta en paz y seamos amigos.

Ahora entiendo muchas cosas. La felicidad está en uno mismo y nadie te va a querer si no te quieres, así que ahora voy a quererme pero porque soy quien soy, sin ninguna condición, ya no condicionaré mi amor a mi misma a logros personales o profesionales, porque valgo mucho, porque buenas personas hay pocas. Porque deseo la felicidad de todos y sobre todo de aquellos que me quieren y me apoyan en momentos críticos, momentos que de seguro irán disminuyendo.

Este mes que viene se reinician las clases de baile y empieza el taller de uno de mis escritores favoritos. A eso le sumo la chambita de un mes y medio que he conseguido y las dos posibles de las cuales aun espero respuesta, o sea andaré full pero feliz. Tengo una cajita donde guardo los ingresos de La Mosquita y ahora debo conseguir otra para las monedas que pagarán mi segunda -y amada- carrera el año que viene.

Ahora sí siento que esta vida es mía y que no se me escapa de las manos. Ya no siento la sombra de la muerte ni el dolor del odio y el rencor.

Y una vez más puedo decir que soy una guerrera y que esta vez he ganado una batalla muy importante! quizá una de las más importantes de mi vida, una cuyo campo era mi interior, mis miedos y debilidades.

De aquí en adelante sólo queda disfrutar las cosas maravillosas que tengo, una familia que me ama, que se preocupa por mi y a quienes sólo he mostrado cara de odio. Unos amigos, muy pocos pero que darían su vida por mi y yo por ellos. Una vida con aún muchos años que me esperan. Una carrera medianamente exitosa, lo cual es un logro dado que no era mi primera opción, o sea que no es lo que más me gusta. La ilusión de la segunda carrera...en fin

No diré que me siento en éxtasis de felicidad porque no es así, eso me pasaba antes, sí, cuando estaba desequilibrada con ese timo cerrado, pero ahora no, ahora simplemente me siento en paz y como si hubiese vuelto a nacer.

Un abrazo a todos y buen fin de semana.

La semana que viene estoy viajando a una zona que me dicen es brava, bueeeno, ya he ido a tantos sitios olvidados por Dios, que no creo me espante este lugar.

¡Nos vemos!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Esta maldad bondadosa fue comentada por